64.-LA VIOLENCIA ESTA EN NOSOTROS.

La inseguridad en la sociedad uruguaya crece día a día y año a año. Y puede tener -como motores generadores de la misma- a los delitos con riesgo de vida y a la violencia en todas sus manifestaciones, entre otros posibles.
Las modalidades delictivas de hoy parecen tener un nuevo modelo: los cacos quieren cash. Cada vez menos optan por trabajar meses en el clásico y antiguo “boquete desde la finca vecina” y cada vez más prefieren las operaciones relámpago a la luz del día.
Supermercados, cambios, locales de pagos, estudios de profesionales, empresas, hoteles, almacenes, kioscos de barrio, joyerías de Shopping….en fin, todo aquel lugar que tenga efectivo es tentador para los ladrones. Y no es un tema de barrio rico o barrio pobre: aquí en Montevideo campea en todos los componentes del tan reconocido “Saludo a los barrios” inmortalizado por la Reina de la Teja, allá por los años 80.
Y tampoco es propiedad exclusiva de la capital: los pobladores de cualquier ciudad del interior, otrora mas pacificas y tranquilas que ahora, pueden dar fe de lo que escribo: rapiñas en pleno centro, líos en locales bailables, pedreas a los vecinos sin saber el por qué, venta y circulación de la droga, violencia doméstica, etc.
Visualizando a Florida, podría aplicar la letra de su famoso Himno murguero, anterior sin duda al de Raúl Castro, cuando dice: “De la Avenida hasta el Prado etc. etc.…”
O sea, en ningún lugar estás seguro.
El peligro acecha. Parece estar siempre subyacente apenas salís de tu casa, y puede esperarte en un comercio, en el mercadito del barrio, cuando vas a pagar las cuentas al local, cuando vas conduciendo por la carretera, cuando salís del Estadio, cuando paras el auto en una esquina por las noches, o cuando viajás en ómnibus o en un taxi, a cualquier hora.
Pero constituyendo delito, o no, la violencia está en todos nosotros.
Nos estamos transformando en seres violentos, aunque mas no sea verbalmente: en el tránsito, en el trabajo, en el hogar, en el deporte…. Nos estamos volviendo un poco intolerantes en el respeto a las opiniones ajenas discordantes con las nuestras. Nos estamos volcando a ser desconfiados, a poner bajo sospecha a todos los marginados que pasan por la calle o hurgan la basura, y si bien la delincuencia es muchas veces vecina de la pobreza esto no constituye una ley unívoca.
En Montevideo, por ejemplo, hay “zonas rojas” que proyectan ser transformadas en ghettos para ser copados por fuerzas especiales; y opino, como simple observador, que esa idea sería absolutamente errada. No se debe creer que al “encerrar” esos barrios se controlaría el sector delictivo que ahí vive y que es una parte del mismo. Pongo un ejemplo: desde hace muchos años vemos la participación de la Policia Militar y hasta el ejército en las famosas favelas de Rio de Janeiro.Grandes operaciones militares que incluyen hasta la entrada y el “copamiento” bajo fuego de dichos barrios….y sin embargo las estructuras siguen tan campantes como siempre. Esa represión poco ha cambiado: el problema sigue latente.
No debemos poner a esos uruguayos libres bajo el candado de la sospecha: debemos abrir esos cerrojos y para ello solo creo en una llave: la educación integral a largo plazo.
Y privar de la libertad a quienes no puedan convivir de forma pacífica con el resto de los integrantes de la Sociedad y tratar de recuperarlos.
Por otra parte, no creo que solo de los asentamientos y barrios marginados provengan los hinchas de futbol que destrozan los estadios después de un partido, que rompen todo a pedradas, y que pueden llegar a matarse entre sí…Hoy hay líos hasta en algunos partidos de rugby y de hockey…
Ni que de allí provenga toda la violencia doméstica y sexual actual, siendo que en Uruguay mueren mas de 20 mujeres por año (sin contar las que quedan vivas pero con las secuelas de esa violencia) y aumentan año a año las denuncias. Esto nos regala el triste privilegio de -por ese concepto- tener una tasa de mortalidad 3 veces mayor a la de algunos países europeos.
Tampoco creo que sean muchos los uruguayos que acceden a Internet en esos barrios marginados. Digo esto porque la violencia que se detecta en los foros de opinión en Internet es, sencillamente, espeluznante. Cualquier hecho deportivo, o político, por ejemplo, es transformado en el disparador de opiniones que muchas veces dejan traslucir los sentimientos más oscuros de los seres humanos: el fascismo, la discriminación racial y sexual, la intolerancia, la represión, el ultranacionalismo, entre otras lacras del pensamiento humano, muchas veces expresados mediante un ciego e irracional fanatismo. Todo basado en el más repudiable anonimato, por supuesto.
Y la inseguridad, aumentada por la violencia en que vivimos, lleva al hecho de armarse para defenderse, algo comprensible y tan antiguo como el Hombre. Primero fue la piedra, luego la madera, luego el Hombre unió la piedra con la madera, luego vino el hierro, el acero, mas tarde las armas de fuego, las armas químicas, las armas nucleares. El Hombre siempre ha estado vinculado a las armas y estas están casi siempre asociadas a la guerra. O sea que se asocia de inmediato a un combate….y con una vida que se salva con una muerte.
Estados Unidos tiene el record: 90 armas cada 100 habitantes, siendo los dueños de 270 millones de las 875 millones de armas de fuego conocidas en el Mundo.
La cifra de armas por habitante no es relevante para determinar el grado de violencia en un país ya que Suiza y Canadá tienen números parecidos a Estados Unidos y no hay problemas de violencia. Es probable que la violencia en EUA se deba a factores socioculturales, y los numerosos ejemplos de tiroteos, de matanzas y asesinatos en masa de los colegios americanos en los últimos años se deban a un inadecuado manejo emocional de los portadores de armas. Las enseñanzas del Far West? Híper valorización del ciudadano que mata más rápido? Billy The Kid transformado en héroe de masas?
No lo se. Solo se que no logro entender como jóvenes y hasta niños puedan llevar a la escuela una Magnum 45 junto al típico sándwich americano.
Pero Uruguay tiene una tasa entre 30 y 40 armas cada 100 habitantes, mucho mas alta que algunos países de nuestra propia America, como Colombia, por ejemplo. Estas son las armas en manos de civiles, sin considerar las poseídas por los ejércitos.
O sea, que aunque nos pese, somos un país armado y con tendencia en alza.
Y las armas llegan hasta las manos de civiles presos para matarse entre sí.
Y por ultimo, tenemos las otras armas, las armas mas desparramadas por todo el planeta Tierra: el pasado año se vendieron 37 mil nuevos vehículos en Uruguay. O sea que, en un país donde se reciclan tantos autos y donde el parque automotor sigue siendo un valioso museo ambulante del automóvil, hay 37 mil nuevas armas en las calles y carreteras del país.
Casi 500 muertos por año, miles de lesionados y lisiados, causados por estas armas de dos y cuatro tiros, manejadas muchas veces de forma irresponsable, con el plus del alcohol, de la droga, y de la imprudencia. Y cuidado, porque las estadísticas dicen que el 70 % de los accidentes viales mortales son en el interior de nuestro país, y que suceden más en las ciudades que en las carreteras!!!
Esos muertos nos dan un lugar en el podium: terceros en America Latina, solo superados por Argentina y Venezuela, y muy por encima de Brasil….Es increíble!!!
Así que….No se que hacer mañana cuando tenga que viajar al trabajo, o por la tarde al ir a pagar las cuentas. Y Ud. que opina?