Concierto en Jacksonville

Concierto en Jacksonville



Bienvenidos!!!


Bienvenidos a este espacio...Yme apresuro a aclarar que -como me comentó hace poco una señora al parecer desilusionada- este no es un blog de música, o exclusivamente de música...Si bien es importante en mi vida, tambien existen otros temas que iran saliendo como al pasar. Y no serán temas emanados exclusivamente de Conservatorios o Universidades; serán el resultado de lo adquirido al recorrer el camino que forma a todos los seres humanos desde que nacen: el de la Vida.

PROXIMAS ACTUACIONES

Viernes 22 de agosto: Museo del Vino .Maldonado y Gutiérrez Ruiz. Hora 21:30. Cubierto artístico: $250.

Viernes 29 de agosto: Museo del Vino Maldonado y Gutiérrez Ruiz. Hora 21:30. Cubierto artístico: $250.


Noneto Sala Zitarrosa_11 de Marzo del 2011

Noneto Sala Zitarrosa_11 de Marzo del 2011
Alvaro Hagopian (Piano) Cono Castro (contrabajo) Jorge Trasante (Percusión) Matias Craciun y Franco Locardi (violines) Bruno González (viola) Rodrigo Riera (cello) Jorge Nocetti (Guitarra electrica) Nestor Vaz (bandoneón)


Noneto con Larbanois Carrero

Fotos del Quinteto

Fotos del Quinteto
Quinteto en La Spezia (Julio 2009)

Quinteto en Guambia (julio 2009)

Quinteto en Jacksonville (julio 2010)

Matias Craciun

Alvaro Hagopian

Cono Castro

Jorge Nocetti

Nestor Vaz

SECCION DE FRASES SUELTAS (Que también podria llamarse "Fuera de contexto...")

Pensamientos que surgen, o que vamos encontrando por ahi....


Hay un punto en tu vida, en el que te dás cuenta: quién importa, quién nunca importó, quién no importa más, y quién siempre importará.


No todas las distancias son ausencias, ni todos los silencios son olvidos, pero como se parecen!!!


Tengo todo el tiempo del Mundo, pero no quiero perderlo ahora....


Intento vivir con el paradigma de decir lo que pienso y hacer lo que digo. (Líber Seregni)


Hay basura por todos lados. Pero lo contundente es irreversible. Lo bueno es bueno, y lo mediocre es mediocre. (Hugo Fatoruso, sobre el buen gusto musical)


Nos volvemos muy viejos demasiado pronto, y un poco sabios demasiado tarde....


Siempre el coraje es mejor.La esperanza nunca es vana.(Jorge Luis Borges)


Si el Mundo fue, ya no sera una porqueria, porque en el Mundo estamos vos y yo. (Horacio A. Ferrer)


Es mas facil desintegrar un atomo que un preconcepto (Albert Einstein).

Dejá no me lo repitas más
nosotros y ellos vos y yo
que nadie se ponga en mi lugar
que nadie me mida el corazón.
(Fernando Cabrera, "La casa de al lado")

lunes, 6 de abril de 2020


97.-CORONAVIRUS. O CUANDO LA HUMANIDAD SE SACO SU PROPIA TARJETA AMARILLA.
Desde hace unos cuantos años, de vez en cuando me da por poner algunas ideas en un papel con  el único  propósito de desahogar mis interioridades, sin sopesar  el valor que puedan tener esas líneas más allá de lo antedicho. Tómese esto, en consecuencia, como una temprana advertencia para quien-en este momento-  no quiera salir de los juegos matemáticos, abstraerse de videos y llamadas grupales, dejar de oír misas online o escuchar músicos tocando en balcones que dan a calles y plazas vacías.Todo lo anterior por supuesto es válido para atenuar la incomunicación que por estos días padece la mayor parte de la Humanidad y de la cual formamos parte.
Entre tantas cosas que circulan por las redes, ayer mire un video de una española mezcla rara de Nostradamus con los mayas, de profetas con adivinos, que en el 2019 predijo para el presente año 2020 un hecho de mal agüero  muy similar al que estamos soportando: un evento  de extensión mundial,  que duraría 40 días, que afectaría solo a los humanos y que permitiría al planeta Tierra recuperarse de las agresiones de la presencia humana. Mas una larga lista de etc. etc.
Decenas de hipótesis pululan acerca del origen de esta pandemia, pero solo una es claramente irrebatible y demostrable: no fue la Tierra quien origino lo que hoy vivimos. Y acá debemos distinguir y contextualizar  dos escenarios bien claros, uno es el Planeta Tierra sin los humanos y su actividad, y el otro es el planeta Tierra per se, con las otras biologías paralelas o forjadoras de la darwiniana teoría de la línea evolutiva del Homo sapiens.
No fue el planeta quien originó este problema. No fue un mega evento tal como un tsunami, o un terremoto, o una actividad volcánica, o un cambio en la posición de su eje de rotación. Nada  de eso.Los sistemas naturales que conforman la anatomía y fisiología de la Tierra funcionan automáticamente: sostiene  su motor interior encendido, sigue girando alrededor del sol, y mantiene vigente las leyes fundamentales que hacen a su funcionamiento.
Todo lo contrario. Fue un minúscula capsula con contenido proteico cuyo objetivo es encontrar un huésped (nosotros) para poder reproducirse y atacar a otros (nosotros), algo que los humanos ya conocemos  ya que día a día convivimos con muchísimos virus. Entre las múltiples opciones de la génesis  de esta cepa con nombre de cooperativa uruguaya de viviendas, se encuentra  la que considera que su aparición se debió a un descuido en alguno de los tantos experimentos genéticos que pululan por los laboratorios del Mundo. Sea o no verídica esta apreciación, me inclinaría a pensar que el origen de todo esto puede andar por ahí. El mecanismo de propagación parece estar claro. Las finalidades están en la nebulosa de las especulaciones.
De ser así, este es un problema que la propia Ciencia debe y puede solucionar en el menor tiempo posible. Debe ser la ciencia quien estudie, entienda, solucione y prediga  los procesos, observando la repetición de los hechos, racionalizándolos hasta llegar a la ciencia predictiva, es decir, aquella que es capaz de anticipar los fenómenos que pueden dañar a los humanos. Y esto vale desde un pararrayos a una vacuna. Y será la ciencia quien encuentre el remedio para este mal.
Logrado esto, como deseamos, y como siempre acontece, todo pasara a la historia. Los países del Mundo  seguirán enfocados  en defender a muerte sus posesiones materiales encerradas en sus fronteras  políticas y geográficas, y seguirán vigentes  otras  líneas divisorias como las humanas y religiosas que determinan que mueran por día mas humanos por hambre o por creer en otros dioses según de qué lado de esas líneas se encuentren.
Hoy día queda en evidencia que de nada vale tener tanques, cañones, misiles ni camiones blindados…Ni enormes portaaviones y barcos de guerra surcando los mares. De poco valen la muralla china, la línea Maginot, el muro entre México y Estados Unidos, ni las hermosas ciudades fortalezas del  Midi francés. Un microscópico individuo se ha plantado irrespetuosamente a su frente, y contra él es la lucha poniéndole barreras sanitarias que todos deberíamos respetar conscientemente, sin necesidad de militarizar algo cuyo acatamiento es un deber moral.
No. No fue el planeta Tierra quien el originó esta pandemia. La aparición y su dispersión  es resultado de la actividad humana al igual que la capa de ozono,  la contaminación de la atmósfera y de los mares, la desaparición de especies y tantas otras heridas que le hacemos a la piel terrestre. Y la Tierra ya tiene mucha consideración con nosotros: haciendo  más o menos 6 mil o 7 millones de años que el planeta apretó la tecla Play, hoy posee  la misericordia  de no castigarnos con el envió de un archivo adjunto en un milisegundo de su ya larga vida.
Esa piel de la Tierra habitada por 7 mil millones de piojos que le causarnos algunos escozores que, muy de vez en cuando, la hacen sacudir como quien tira las coyunturas de sus dedos, o gira su cabeza para re acomodar las vertebras cervicales…Si ella quisiera, quedarán muy pocos piojos, y no resucitados, precisamente.
Creo que  establecida la percepción de que, pasado un tiempo al final de esta locura, los más optimistas de los optimistas sostienen que todo va a cambiar….y los más optimistas de los pesimistas pensamos que  todo seguirá  igual. Me afilio a la hipótesis de que unos meses de pandemia podrán (?) cambiar en algo su comportamiento, pero nunca la naturaleza de los seres Humanos. Nunca lo hizo, ante catástrofes iguales o mayores y esta no será la excepción. Se seguirá refractando la realidad, y surfeando sobre las desigualdades y pandemias endémicas que hace centenares de años esperan la solución.
La  Humanidad necesitaría apretar  el botón de reseteo…
La propia Humanidad se acaba de sacar una tarjeta amarilla. Y es reincidente. De ahí a la roja definitiva es solo un paso: apretar la tecla de apagar.